El verdadero sentido de la Navidad
En estos días que se aproximan, nuestro mundo se sumerge en el consumismo y a veces, nos distrae realmente del verdadero significado de la Navidad.
Navidad (procede del latín “nativitas” que significa nacimiento), no es la celebración de una fecha, sino de un hecho.
Es la fiesta que conmemora el nacimiento de Jesucristo, un día muy importante para los cristianos.
Porque Dios envió a Jesús, su único hijo, a nacer, vivir y morir por cada uno de nosotros. Gracias a su amor y sacrificio hemos sido adoptados como hijos de Dios, por medio del bautismo.
El nacimiento de Jesús había sido profetizado.
En Mateo 1, por ejemplo, se hace referencia a una profecía de Isaías (Is. 7,14) que anunciaba la concepción de la Virgen y la misión de Jesús.
Se encarna en un niño que quiere llegar a nuestras vidas, por ello, la importancia del Adviento.
Este tiempo de preparación, penitencia y reflexión antes de Navidad que ayuda a preparar los corazones como un pesebre adecuado para que nuestro Señor repose en Él.
Es un destacado acontecimiento bíblico, ya que marca el paso del Antiguo Testamento al Nuevo Testamento.
Esta solemnidad, que conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén, se celebra el 25 de diciembre de cada año.
En la víspera de este día, que conocemos como “Noche buena”, los cristianos celebran la víspera del día de Navidad o Natividad de Jesús.
Cabe mencionar la celebración de la “misa de gallo” o “misa de los pastores” caracterizada por su duración que comienza antes de la media noche y finaliza para anunciar el nacimiento de Cristo, símbolo de que, la luz de Dios se abre paso en medio de las tinieblas.
Con la celebración de la Natividad, en las vísperas del 25 de diciembre, se inicia en la Iglesia Católica el llamado “tiempo de Navidad” que finaliza con la solemnidad del Bautismo del Señor (domingo después de la epifanía).
Este periodo abarca distintas fiestas litúrgicas importantes, como la de la Sagrada Familia, la solemnidad de Santa María, Madre de Dios, la Epifanía del Señor y se puede mencionar entre otras la de San Esteban (protomártir), San Juan Evangelista y los Santos Inocentes.
Origen de la Navidad
Sobre el origen, de esta fecha 25 de diciembre como día de la Navidad, existen diversas teorías que se han ido estudiando a lo largo de la historia.
En el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento no aparece la fecha registrada.
Algunos estudiosos de la Biblia, han podido calcular la fecha, a raíz del momento de la concepción de Juan Bautista.
Siguiendo los pasos de Zacarías como sacerdote, que oficiaba en el Templo y los embarazos de Isabel y María.
Sí sabemos, que esta fecha ha sido significativa en los pueblos de la antigüedad, que celebraban durante el solsticio de invierno en el hemisferio norte (21 diciembre).
En distintas culturas, coinciden sus festividades de carácter pagano, creyendo en otros dioses. Ejemplo de ello, tenemos el Imperio Romano que festejaba Saturnalia en honor a Saturno.
Se celebraban grandes fiestas. Otros ese mismo día lo consideraban como el cumpleaños de Mitra, dios del sol.
Hay autores que defienden que ya en el s.III se celebraba el nacimiento de Cristo en esta fecha, antes de que los romanos celebraran la fiesta del sol invencible (Sol invictus).
Se realizó siglos después, la adopción de esta fecha, y para ello, fue de ayuda el testimonio de Sexto Julio en el año 221, acerca de la fecha del nacimiento en Judea y en el 354 después de Cristo, el calendario litúrgico filocaliano.
Fue establecida el día 25 de diciembre, como día de solemnidad por la Iglesia Católica en el año 350, gracias al Papa Julio y posteriormente, en el año 354, el Papa Liberio decreta este día como el nacimiento de Jesús de Nazaret.
Tradiciones navideñas
Cómo sabemos las tradiciones, son una manera de hacer presente, de recordar lo que ha sucedido.
En este caso, la Navidad, su significado es más profundo, es un modo también de evangelizar.
Existen tradiciones que nos ayudan a vivir este tiempo más intensamente, a vivir el misterio que se celebra, el nacimiento de Jesús.
Algunas de estas tradiciones son:
1. Nacimiento o Portal de Belén
Según los expertos, las primeras expresiones gráficas de nacimientos, se hallan en las catacumbas romanas de Priscila en el S.II.
Una de ellas, hace referencia al nacimiento de Jesús en brazos de la Virgen María. En otras catacumbas en los s. III y IV se pueden observar escenas de la Epifanía, con los reyes magos.
En el S.V, el papa San Sixto III, celebraba el nacimiento con algunas representaciones en una gruta que había mandado construir en su iglesia.
Sin embargo, se considera como fundador de los nacimientos, a San Francisco de Asís, a quien se le atribuye, el haber organizado el primer nacimiento en 1223 en el día de “Noche Buena”.
El revivió el recuerdo de Jesús nacido en Belén, quería mostrar las condiciones en que sucedió, las dificultades que pudieron encontrar y ayudar a comprender este mensaje de amor, para mejor adorar la humanidad de Cristo.
Una tradición dice que esa noche, un hombre que estaba allí, vio al niño sobre el pesebre, y cómo San Francisco lo acunó en sus brazos y lo durmió.
Gracias a él, los cristianos pudieron percibir que en Navidad, Dios es realmente, el Dios entre nosotros.
A partir de este momento, se extendió por todos sitios y pasó con el tiempo, a formar parte de nuestros hogares e iglesias.
El portal de Belén, nos invita a contemplar, a reflexionar el gran misterio de Dios, hecho hombre, por amor al hombre.
Podemos también, apreciar las virtudes de cada una de las personas que vivieron este hecho:
- La Virgen María, simboliza la fidelidad, la pureza y el amor.
- San José, representa la fortaleza y obediencia.
- El niño Jesús, el Hijo de Dios, que trae la luz al mundo y nos redime.
- La estrella de Belén, la fe y esperanza que guía la vida de los cristianos.
- Los reyes magos, revelan la naturaleza divina de Jesús.
- Los animales, la calidez del hogar.
- Los pastores, la sencillez, el trabajo y el servicio.
Normalmente, se monta el Belén hacia el 8 de diciembre, fiesta de la Inmaculada Concepción.
Habitualmente, colocamos al niño Jesús con el resto de las figuras y no es correcto del todo, por la sencilla razón, de que en la víspera de Navidad es cuando se coloca al niño ya que ha nacido.
Para quitarlo, puede ser el domingo del Bautismo del Señor o bien se puede conservar hasta el día 2 de febrero, fecha que se asocia con la presentación de Jesús en el Templo y coincide con la fiesta de la Candelaria.
2. Árbol de Navidad
Es un elemento decorativo, que tiene su simbolismo en la celebración de la Navidad.
En la antigüedad, los germanos creían que todo estaba sostenido de las ramas de un árbol llamado “dios Odín”. Y a este dios se le rendía culto durante el solsticio de invierno. Se adornaban con antorchas y bailaban y cantaban adorando su divinidad.
Durante la evangelización de Alemania en el S.VIII, se dice que San Bonifacio, para acabar con este paganismo, cortó el árbol y en su lugar plantó un pino con hojas perennes, que simboliza el amor de Dios.
Lo adornó con manzanas, representando el pecado original; y las velas, símbolo de la luz de Cristo y la gracia que reciben los hombres que aceptan a Jesús como Salvador.
Estas manzanas y velas, con el tiempo se convirtieron en bolitas y luces, tal como lo conocemos hoy en día.
El árbol, su color verde y su forma de punta: símbolos de la vida y el amor de Dios.
La estrella representa la fe, la esperanza que debe guiar nuestras vidas, como creyentes.
Las bolitas: representan los dones que Dios entregó a los hombres.
Éstas, según su color también tienen un significado:
- Doradas: oraciones de alabanza
- Plateadas: oraciones de agradecimiento
- Rojas: petición
- Azules: arrepentimiento
También se suele adornar con distintas figuras que representan las buenas acciones y sacrificios, son los regalos que le damos en Navidad al niño Jesús.
3. Villancicos
Los primeros villancicos que se conocen corresponden al S.V, fueron compuestos por evangelizadores con la finalidad de llevar la Buena Nueva a los campesinos y aldeanos que no sabían leer.
Hablaban sobre el misterio de la Encarnación en un lenguaje popular.
Su nombre viene de “villanus” que es como se le llamaba al aldeano.
En el S.XIII , se extiende por todo el mundo junto con los nacimientos de S. Francisco de Asís.
Cantar villancicos es un modo de demostrar alegría y gratitud a Jesús.
4. Tarjetas de Navidad
Es una costumbre muy bonita, donde se comunicaba con alegría a nuestro seres queridos el nacimiento de Cristo.
El origen, está en las escuelas inglesas, donde se les pedía a los estudiantes, antes de empezar las vacaciones de invierno, escribir un mensaje a sus familias sobre la Navidad.
5. La flor de Nochebuena
Su nombre náhuatl es “tlazochitl”, es originaria de México y significa “flor que se marchita”.
Simbolizaba para los aztecas, la sangre de los sacrificios que los indígenas, ofrendaban al sol para renovar sus fuerzas.
La bautizaron los españoles, como flor de Nochebuena porque florece en diciembre y la utilizaron, como símbolo de estas fiestas navideñas.
Epifanía
La epifanía, se celebra el día de Reyes o día de los Reyes Magos.
Forma parte de las celebraciones del “tiempo de Navidad” y tiene lugar el 6 de Enero.
La palabra epifanía significa “manifestación” y referida al Señor, corresponde a los momentos en que Jesús, se manifiesta o se revela al mundo.
Esta celebración gira en torno a la adoración de los tres reyes magos a Jesús, como símbolo del reconocimiento del mundo pagano, de que Jesús es el Salvador de toda la humanidad.
Origen:
Esta fiesta tiene su origen en la Iglesia de Oriente. En este día se celebraba el solsticio tanto en Egipto como en Arabia, festejando con evocaciones muy antiguas al sol victorioso.
Epifanio explica, que celebraban los paganos el solsticio invernal. Hacían una fiesta muy significativa en el templo de Coré.
Epifanio trata de darles un sentido cristiano, al decir que Cristo es la verdadera luz y por ello los cristianos celebran su nacimiento.
Es hasta el S.IV cuando la Iglesia, comienza a celebrar en este día la Epifanía del Señor.
Los reyes magos
Según el Nuevo Testamento, los reyes magos eran personas sabias, hombres que por su cultura y espiritualidad, cultivaban su conocimiento esforzándose por mantener un contacto con Dios.
Ellos siguieron la estela de la estrella de Belén, pues sabían que esta les indicaría el lugar del nacimiento del niño Jesús, Hijo de Dios.
Emprendieron el viaje cargando el regalo que le ofrecerían al nuevo rey, el Mesías.
Como sabemos. son tres los reyes magos.
Melchor, le llevó un cofre de oro .
Éste metal muy valioso, sirve para reconocer la realeza y grandeza de la persona que lo recibe. Esto confirma el reconocimiento de Jesús como rey de reyes.
Gaspar, le preparó inciensos.
En la Biblia, el incienso se usaba para ofrecérselo a Dios. Es una prueba de la divinidad de Cristo.
El evangelista Mateo, nos dice que los reyes reconocieron la divinidad del niño recién nacido.
En varios pasajes de la Biblia se hace mención de ello, y vemos como en el salmo 141, el incienso se convierte en un elemento clave de la liturgia de la Iglesia, y en la intercesión, pues acompaña a las oraciones que hacemos para presentarlo ante el Padre.
Baltasar, le ofrendo mirra.
Los judíos usaban la mirra para embalsamar los cadáveres, pero también como perfume.
Símbolo ello de lo carnal, lo humano. Nos enseña que Cristo se hizo humano, verdadero hombre, y murió por nosotros, por eso necesitó ser embalsamado con mirra.
Ellos forman parte del nacimiento o Portal de Belén ya que estuvieron presentes en la revelación del niño Jesús como el Mesías.
El hacer regalos a los niños, hace alusión a la generosidad que estos magos tuvieron con el niño Jesús.
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Escrito por Mercedes Roldán.
Me encanto todo esto de la Navidad y eso porque eso debemos de sentir.
Gracias, Sofía.